Contratos con el Estado

En muchas ocasiones el Estado ofrece contratos con mucho potencial para los empresarios privados, que lo pueden ver como un buen negocio desde el punto de vista económico. Por lo que en esta ocasión se explicará a breves rasgos y de manera simple el proceso de contratación pública, para que las personas naturales o jurídicas, puedan tener una idea clara de cómo participar en contratos estatales.

Los empresarios que desean dar servicios al Estado como contratistas deben inscribirse en el Registro Único de Proveedores (RUP), y, además, es altamente recomendable que participen como compañía, es decir, como persona jurídica. Asimismo, es importante que el RUP cuadre con lo determinado en el Registro Único de Contribuyentes (RUC) del Servicio de Rentas Internas (SRI), principalmente lo referente a las actividades.

Teniendo el RUP y preferentemente la compañía, el empresario va a poder recibir notificaciones para participar en contratos estatales, para lo cual deberá realizar una oferta dentro del proceso de contratación. Dicha oferta deberá cumplir con los términos de referencia y pliegos determinados por la entidad pública, en donde se establecen los requisitos para poder contratar.

Los requisitos para contratar pueden ser varios, tales como:

Una cantidad de patrimonio específica
Años de experiencia de la empresa
Años de experiencia de los colaboradores
Perfiles específicos para ciertos colaboradores
Contar con todos los permisos municipales
Cantidad de empleados afiliados al IESS
Reglamento interno de trabajo aprobado
Actas de entrega recepción de trabajos similares en el sector público y/o privado
Entre otros

En el caso que la oferta se encuentre completa y se cumpla con todos los requisitos se puede aumentar la posibilidad de ganar la adjudicación del contrato. En muchas ocasiones, los participantes son descalificados por cuestiones de forma. Por esta razón, hay que realizar la oferta con mucho detalle y procurando cumplir con todos los requisitos.

Una vez firmado el contrato, hay que tomar en cuenta que se debe cumplir el mismo a cabalidad, para evitar que la entidad pública dé por terminado el contrato de manera unilateral y se declare a la empresa como contratista incumplido, lo cual es muy perjudicial, al tener la sanción de no poder concursar con el Estado por algunos años. Por esta razón, es importante contar con buen asesoramiento legal dentro de todas las etapas del proceso de contratación pública.

En conclusión, realizar contratos con el Estado puede ser muchas veces un buen negocio para el empresario privado, sin embargo, hay que tomar en cuenta que las instituciones estatales tienen procesos poco ágiles para los pagos a proveedores, por lo que hay que tenerlo en cuenta al momento de iniciar con estos contratos. No obstante, es una buena oportunidad para ganar experiencia en la empresa que puede servir para acceder a mejores contratos tanto públicos como privados.